El Dilema de los Fundadores de Tiempo Parcial
Con el creciente desafío que representa el acceso al capital, esta realidad se está volviendo más común. Aquí te presentamos algunas reflexiones sobre el tema.
Este es un tema delicado y complejo. Mis conversaciones recientes con varios CEOs, quienes valoraron mi punto de vista, me motivaron a tratarlo de manera amplia en nuestro Pinkletter. En éste artículo me focalizaré en startups de etapa temprana que es donde más frecuentemente suele darse el caso.
Los inicios de una startup suelen ser particularmente desafiantes debido a la exigencia del trabajo y a la escasez de recursos, que a menudo impide remunerar a los emprendedores de manera adecuada. Esta situación lleva a muchos a mantener otros trabajos para poder subsistir.
Es crucial distinguir entre dos escenarios principales: (A) el 'emprendedor de mínima', que necesita un ingreso esencial para subsistir (incluyendo el mantenimiento de sus dependientes, si los tiene) de manera digna, y (B) el 'emprendedor status quo', que se resiste a sacrificar su nivel de ingresos actual y espera que la startup pueda igualar su salario antes de embarcarse completamente en la empresa.
Parte 1 - el emprendedor de mínima
Muchas veces, los emprendedores no tienen suficientes ahorros para sostenerse a sí mismos o a sus dependientes. No es realista esperar que los emprendedores se pongan en una situación financiera precaria para lanzar o validar su Producto Mínimo Viable (MVP). Sin embargo, tampoco se puede esperar que alguien invierta en una startup si parte del equipo no está completamente comprometida. Si ambas partes están interesadas en llegar a un acuerdo, es necesario iniciar un proceso de negociación.
A continuación, vamos a analizar un caso de estudio y reflexionar sobre él desde la perspectiva de un inversor.
Contexto
SuperApp es una creación conjunta de Laura, Pablo y Marcelo. Sin embargo, por ahora, solo Laura puede dedicarse a tiempo completo. Los tres son emprendedores destacados, competentes en sus roles y con habilidades complementarias. Han decidido dividir el equity de manera equitativa (ten en cuenta que dividirlo 1/n puede no ser la mejor idea). Su objetivo es recaudar una ronda de financiación Pre-Semilla para finalizar la construcción del MVP, y planean conseguir la siguiente ronda de financiación en un plazo no mayor a 24 meses. En ese momento, esperan tener suficiente capital para que Pablo y Marcelo puedan recibir un salario de $4.000 al mes, lo que cubriría sus necesidades. Durante este período intermedio, Laura, que ya ha estado trabajando a tiempo completo sin remuneración, recibirá un sueldo de $1.500.
Nuestra mirada
Desde nuestra perspectiva, en términos de la tabla de capitalización, existe un riesgo considerable, dado que el 66% (dos tercios) del paquete de acciones está en manos de personas que no están involucradas en el día a día de SuperApp. Incluso si hubiera un acuerdo de reverse vesting después de 2 años, dependiendo de las condiciones, lo habitual sería que ya se haya adquirido la mitad de las acciones, resultando en un 33% de dead equity. Este es un porcentaje que podría poner en peligro a cualquier startup. En otras palabras, si Pablo y Marcelo decidieran no comprometerse a tiempo completo con SuperApp (por cualquier motivo), la startup, en la práctica, estaría en serios problemas.
Además, la situación actual parece desproporcionada para Laura, quien está dedicando todo a SuperApp, construyendo y captando el capital necesario para que Pablo y Marcelo puedan, en el futuro, dedicarse a tiempo completo. Parecería más lógico que ellos tengan inicialmente una participación reducida en el equity y que, cuando estén listos para comprometerse plenamente, se redistribuya una parte del equity de Laura. En términos prácticos, Laura es la única fundadora, lo que incrementa el riesgo del proyecto. Sería útil evaluar si tiene la capacidad para llevar el proyecto hasta la ronda de financiación Semilla por sí misma. Si ese no fuera el caso, probablemente sería mejor que busque co-fundadores que puedan comprometerse desde el inicio.
Una alternativa sería recaudar suficiente capital para que Pablo y Marcelo puedan recibir los $4.000 que necesitan. Esto sumaría $192.000 adicionales a lo largo de 2 años, suponiendo que Laura acepta mantener su salario inicial de $1.500 al mes. En este escenario, la diferencia salarial podría ser compensada con una participación adicional en el equity.
Parte 2 - el emprendedor status quo
A veces, los emprendedores no están dispuestos a hacer concesiones con respecto a su nivel actual de ingresos y esperan que la startup pueda pagarles un 'salario de mercado' desde el principio. Aquí, por 'mercado' me refiero a lo que pagan las corporaciones (como Google, AWS, etc.) o las startups ya consolidadas, y no al valor de mercado de una startup en etapas Pre-Semilla o Semilla.
A continuación, abordamos algunas de las razones por las que, en general, esta expectativa puede ser problemática:
Una startup es, literalmente, "la empresa" de los emprendedores, donde ellos son los propietarios mayoritarios. Su principal motivación debería ser alcanzar un evento de liquidez, donde puedan vender su equity a un precio elevado en el mercado. Sin embargo, cuando los emprendedores optan por cobrar salarios altos desde el inicio, esto transmite las siguientes impresiones:
No ven un mejor uso para ese dinero que incrementar su propio salario. En otras palabras, optan por un salario más alto en lugar de contratar más ingenieros, personal de ventas, o hacer cualquier otra inversión.
Creen que hacer estas inversiones alternativas no cambiará significativamente el valor presente de su 'exit'. Es decir, consideran que lo que más influencia tiene es su propio trabajo y motivación, lo cual no es escalable, ya que sus horas y energía son limitadas.
Existe un potencial conflicto de equidad al realizar contrataciones futuras, donde los empleados clave podrían ganar mucho menos que ellos, mientras poseen mucho menos equity (si es que tienen alguno). Esta situación podría dañar la cultura de la startup.
Si buscan pagar un 'salario de mercado' a todos los empleados, siempre estarán limitados por el siempre escaso capital de una startup, y no atraerán a colaboradores con los incentivos correctos en mente.
Los emprendedores tienen control sobre los gastos, mientras que los ingresos están sujetos a incertidumbre. Al optar por aumentar sus salarios, los emprendedores incrementan el nivel de riesgo financiero de la empresa. Aquí te dejo algunas alternativas:
Mantener un salario más bajo y otorgarse bonos trimestrales o anuales, basados en el cumplimiento de objetivos y la disponibilidad de efectivo.
Planificar incrementos salariales semestrales o anuales, en función del cumplimiento de metas y la capacidad financiera de la empresa.
Idealmente, los bonos o incrementos salariales deben ser consensuados con los inversores, al menos los principales, incluso si los emprendedores no están formalmente obligados a obtener dicho consenso.
Finalmente, para preservar el bienestar psicológico de los emprendedores, siempre es mucho más conveniente optar por no otorgarse un bono o incrementar el salario, en lugar de verse forzados a reducir el salario base.
Palabras finales
Siempre es beneficioso para los emprendedores y sus inversores, tanto actuales como potenciales, ser honestos acerca del nivel de compromiso de los fundadores. En el mundo de las startups, un día puede sentirse como una semana y un mes como un año. El nivel de compromiso y la rapidez de respuesta de alguien que aún mantiene otro trabajo, incluso si es a tiempo parcial, o que tiene clientes independientes, nunca puede ser comparable al de un socio a tiempo completo.
Independientemente de cuántas horas dedique el fundador a tiempo parcial a su otra ocupación, el cambio en la actitud y la mentalidad del equipo no es lineal con respecto a la cantidad de horas trabajadas.
Un emprendedor que dedica el 80% de su tiempo a la startup rara vez posee el 80% del compromiso de aquel que está dedicado al 100%. ¡En la mayoría de los casos su compromiso es considerablemente menor!
Existen ciertos 'números mágicos' que tienen un impacto profundo en nosotros. El 100% es uno de ellos. Cuando uno se compromete al máximo, es cuando ha dado ese salto de fe, ese paso basado en la pura confianza de que lo que está haciendo es lo correcto. Es ese punto de audacia donde no hay manera de racionalizar la decisión porque los números no cuadran y las probabilidades están en contra, pero de alguna manera decidiste hacerlo. El nivel de compromiso de un socio no puede medirse con una regla de tres simple: o estás totalmente comprometido, o no lo estás. Si por cualquier motivo realmente no puedes comprometerte por completo, entonces es importante dar un paso al costado y ser honesto intelectualmente para que el equity refleje esta realidad. Esto permitirá a aquellos que sí están listos para comprometerse plenamente volar sin restricciones.